Ha llegado el momento de anunciarse e inmediatamente empiezas a pensar: televisión, radio, prensa, revistas, anuncios en camiones, vallas espectaculares (gigantografías) en las avenidas principales, volantes (flyers) repartidos en la calle, perifoneo (voceo), publicidad por e-mail, y cualquier otro medio masivo que hayas visto por ahí. Luego averiguas precios y te das cuenta de que algunos exceden tu presupuesto, decides irte por lo más accesible y probablemente termines poniendo un anuncio en el periódico del martes, unas lonas en calles menos transitadas, repartiendo volantes y enviando correos a tu lista de contactos del messenger.
Si bien es posible que esta forma de proceder genere mayor conocimiento de la existencia de tu empresa o producto, difícilmente logrará crear clientes y por consecuencia aumentar las ventas, que a fin de cuentas es lo más importante para un negocio.
Claro que eso también tiene que ver con la forma en que está diseñado el anuncio, pero en esta ocasión hablaremos de estrategia. La inversión en publicidad no tiene que ser onerosa cuando se usa una buena estrategia.
Los medios de publicidad masiva cumplen con su función: llegan a las masas. Pero en la actualidad el público es bombardeado con publicidad de forma tan excesiva que ha aprendido a ignorar y evadir los anuncios. Piensa, cuando empiezan los comerciales en la TV le cambias a otro canal, ¿verdad?
Sin embargo sí existe gente buscando lo que ofreces, y a ese tipo de público es al que debes llegar.
Define a tus clientes
Para llegar a quienes consumen tus productos o servicios primero debes definir qué tipo de personas son: hombres o mujeres, de qué rango de edades, estudiantes o profesionales, de qué tipo de profesión, son modernos o conservadores, que nivel socioeconómico tienen, etc. Mientras más conozcas de tus clientes potenciales mejor podrás planear cómo llegar a ellos. Tal vez abarcas un mercado muy amplio, pero para una publicidad más efectiva trata de enfocarte en un grupo con mayor potencial de compra. Por ejemplo, si vendes libros y tienes mayor volúmen de ventas de libros escolares, enfoca tu publicidad hacia los estudiantes.
Ubica tus anuncios en el lugar correcto
La ubicación es muy importante. Ciertamente en una avenida principal de la ciudad tendrás mayor cantidad de vistas, pero si no es el lugar donde suelen estar tus clientes potenciales será una inversión más costosa y con menos resultados. Si tus clientes potenciales son deportistas, te conviene más anunciarte en o cerca de gimnasios y estadios.
Inscríbete en directorios
El que busca encuentra. Un gran porcentaje de las personas suelen consultar la Sección Amarilla y otros directorios cuando necesitan algo, si han visto tu publicidad antes es muy posible que terminen llamándote a ti en lugar de tu competencia, pues la presencia de tu marca les dará cierta confianza sobre la calidad.
Anúnciate por internet
El internet y Google se han convertido en una herramienta cada vez más utilizada para la búsqueda de productos y servicios. La gran ventaja de aunciarse en internet es que la publicidad es dinámica, esto quiere decir que los anuncios que aparecen tienen relación con lo que se busca. Ciertamente es recomendable tener una página web, pero aún si no la tienes puedes inscribirte en algún directorio o sitio de anuncios (como Mercadolibre.com) donde la publicidad es gratuita o tiene precios muy accesibles.
Google ofrece un servicio llamado «Google Ads» donde compras publicidad que aparecerá en las búsquedas que estén relacionadas, y solamente pagarás por cada clic que alguien haga en tu anuncio (el cual podría estar ligado a tu página web o espacio en un directorio). El costo de esto varía, cada clic puede costarte desde centavos hasta cientos de pesos (dependiendo de las palabras de búsqueda), pero es posible fijar un límite de cuánto quieres gastar y puede ser realmente económico.
Las relaciones humanas
Por último queremos recomendar que de ser posible vayas directamente con tus clientes potenciales y les entregues tu publicidad en persona (no tiene que ser venta de puerta en puerta), tal vez hacer una presentación de tus servicios o productos. No necesitas ir muy lejos, incluso es mejor que vayas con personas y negocios (en caso de que vendas a negocios) que se encuentren cerca del área donde tienes tu casa, oficina o local.
La razón de esto es la creación de confianza. Este elemento impulsará a las personas a convertirse en tus clientes, ya que saben quién eres, estás ubicado cerca, los atiendes amablemente y seguramente hasta les agrades. De esta forma optimizarás recursos publicitarios y crearás clientes leales que te recomendarán con sus amistades y conocidos, y la recomendación es la mejor publicidad que existe.
(y es gratis)