Un sitio web es la imagen de una empresa en internet y un vínculo directo con los clientes. Este hecho no debe ser tomado a la ligera, pues en la actualidad, muchas personas consideran la calidad en el diseño de un sitio web como un indicador de la calidad de la empresa.
1.- Consistencia con la Identidad Corporativa
Tomando en cuenta la gran interacción que representa con los clientes actuales y potenciales, el diseño de un sitio web ya debe ser considerado como parte de la identidad corporativa, y como tal adecuarse a los lineamientos de la imagen que se desea proyectar de la empresa.
Consistencia visual, en la comunicación escrita, y en la experiencia generada por el uso, deben procurarse en el diseño y la usabilidad del sitio. Toma tus tarjetas de presentación y tus folletos publicitarios y compara el diseño y el contenido con tu página web, ¿la imagen que se proyecta de la empresa es la misma?
2.- Navegación sencilla para el inexperto
Cuando una empresa tiene varios giros, productos que entran en más de una categoría, o simplemente mucha información, con frecuencia se comete el error de hacer una navegación confusa o recargada en la que es fácil perderse (incluso para quienes estamos acostumbrados a navegar por internet).
El menú del sitio debe ser fácil de ubicar, siempre presente y en la medida de lo posible contener dentro de categorías los enlaces al resto del contenido. No hay que olvidar colocar un botón de inicio con el que se pueda regresar al principio de la página.
Colocar un buscador por palabras clave también es recomendable.
Piensa como si la página la fuera a ver tu abuelita, ¿encontraría todo fácilmente?.
3.- Compatibilidad con diferentes navegadores
Pareciera mentira, pero aún existen muchos que al diseñar y programar una página no toman en consideración la funcionalidad en diferentes navegadores.
Si bien Internet Explorer sigue teniendo muchos adeptos, otros navegadores como Firefox, Opera, Safari y recientemente Chrome, están ganando terreno por sus características de seguridad y rapidez en la interpretación de código que, dicho sea de paso, difieren significativamente del IE.
Esto le añade complejidad a la creación de un sitio web, pero como en todo, la atención a los pequeños detalles hace una gran diferencia.
4.- Una página en construcción es la perdición
Uno de los «pecados capitales» en el desarrollo de un sitio web es lanzarlo o promocionarlo estando incompleto.
Frases como «Sección en construcción, vuelve pronto» no solo frustran al usuario, sino que afectan negativamente la imagen que se proyecta del empresa, y predisponen al visitante a no explorar el resto del sitio o simplemente no regresar.
Si existe alguna sección pendiente de agregar, es preferible modificar el menú conforme se van terminando, en lugar de tener un «enlace muerto».
5.- Amigable con los buscadores
Todos quieren aparecer en Google y otros buscadores (MSN, Yahoo, etc), sin embargo algunos no toman en cuenta en su diseño y programación web la facilidad de indización y navegación a través del sitio por los «robots» de los buscadores.
Un robot es un programa que se dedica a navegar el internet de forma automática buscando información para registrar y relacionar con otros sitios. Este es uno de los secretos que hacen a los buscadores más efectivos.
Por la misma razón de que son automáticos, los robots tienen preferencia por el contenido textual sobre el visual (imágenes), se saltan el contenido llamado por javascript, el contenido en marcos (frames), no pueden leer el flash, y usualmente solo revisan la sección principal del sitio, por lo que si tu información importante se encuentra escondida en alguna sección a más de un clic de distancia, seguramente no la verán.
La palabra clave aquí es «amigable». Una página ideal es amigable con los clientes, con los diferentes tipos de personas que la visitan, con los diferentes navegadores, con los buscadores. Como en todo lo que se haga para promoción de una empresa, se debe buscar ser claro, útil, y generar una experiencia agradable que se relacione con la marca.